Coles de Bruselas con queso parmesano y base de puré de patatas tipo duquesa.
Esta verdura tan rica es una de las que más me gusta y no es muy común su uso en muchas casa porque en su cocción se emiten muchos fuertes olores, pero yo os voy a enseñar cómo eliminarlos de tu cocina cuando cueces coles, brócoli o repollos.
El puré de patatas en su base hace que toda la verdura se suavice y es una mezcla perfecta para acompañar tanto a platos de carnes rojas, como para comer de primer plato. Te van a encantar.
Ingredientes
1 libra de coles de Bruselas pequeñitas. Busca que sean las más chiquititas para que sean muy suaves.
3 patatas medianas.
½ taza de queso parmesano
1 huevo
2 cucharadas de mantequilla
½ taza de leche
Nuez moscada molida o ralladura de nuez moscada
Sal
Aceite de oliva
Tiempo:
20 minutos
Comensales:
4 personas
Dificultad:
Fácil
Preparación:
Cocer las patatas peladas en una olla.
Mientras cuecen, limpiar las coles con abundante agua, y retirar las ojas que no están bien.
Después hacerles un corte en cruz en la base para que se cuezan bien por dentro.
Poner a cocer las coles con un chorrito de aceite de oliva y sal.
Deben cocer por unos 10 minutos. No más tiempo para que se queden tiernas pero con el alma un poco entera.
Para el puré de patatas:
Cuando las patatas están listas, hacer puré manual de ellas con ayuda del machacador de patatas.
Añadir la mantequilla, y deshacer e incorporar al puré.
Ir añadiendo leche, en poca cantidad porque tenemos que ponerle el huevo al final
A mi no me gusta que el puré de esta preparación esté muy líquido, por tanto añado solo un chorrito de leche en función de la espesura que deseo del preparado.
Cuando está algo más frío, añado el huevo rápidamente y lo remuevo incorporándolo al puré.
Sazonar con sal y nuez moscada.
Sacar las coles del agua cuando están listas y preparar el plato de la siguiente forma:
Hacer una cama con el puré de patata y sobre éste ir colocando las coles de Bruselas.
Sazonar con nuez moscada por encima de ellas antes de ponerles el queso parmesano como final.
Truqui:
Recuerda lavar con cloro tus huevos antes de usarlos y cuando los compres. Haz esto de forma mecánica cada vez que compres huevos y así, cuando no los vas a cocinar en alta temperatura, te garantizas que no contaminen los alimentos con posibles salmonellas que se encuentran en las cáscaras de huevo.
Si no has comido este plato nunca, te sorprenderá su riqueza y matices de sabores. ¡Empezarás a adorar las coles!